En esta obra Asín Palacios trata las conexiones existentes entre el misticismo islámico, o sufismo, y el cristiano, llegando a la conclusión de que existe una relación muy profunda entre ambos.
Los místicos musulmanes cristianizaron el Islam, dado que lo enriquecieron con ideas de Jesús y llegaron a poner en boca de Mahoma frases de los evangelios que el profeta nunca pronunció.
Por otra parte, Asín Palacios demuestra en estos textos la gran influencia de los místicos sufíes en los grandes místicos españoles, como Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz. Incluso defiende la idea de que estas influencias e intercambios entre los dos misticismos no se dan solo en cuestiones de forma o literarias, sino tambien en lo relativo a las ideas; una cuestión de reciprocidad entre las dos culturas monoteístas.
Estamos ante una obra, por tanto, de especial interés en la que se desvela la importancia de la aportación árabe a la cultura española, tanto en la poesía, la novela, la filosofía como en la propia visión del mundo, y escrita, además, con extraordinario rigor.