Immanuel Kant (Königsberg, 1724-1804), el pensador discreto y austero que dio un vuelco a la filosofía,
fundamentó de nuevo buena parte del sistema conceptual en Occidente. Creó el idealismo transcendental y fue un
incansable defensor de los ideales de la Ilustración: el valor de atreverse a conocer por cuenta propia, de ampliar el
ámbito de la libertad y de construir una sociedad más justa desde la autonomía y la responsabilidad individuales. En su
análisis de conceptos y sistemas, Kant instauró la "crítica" de la razón para establecer sus límites: ¿Hasta dónde
puedo llegar en mis razonamientos? ¿Dónde acaba lo quimérico y comienza lo real? Recurriendo a la crítica, el ser
humano podrá responder a las grandes preguntas: ¿Qué puedo saber? ¿Qué me cabe esperar? ¿Qué debo hacer? Aparecida en
1781, la Crítica de la razón pura aportó una nueva perspectiva sobre la verdad y se convirtió en una obra clave de la I
lustración y de toda la filosofía occidental.