Todas nuestras angustias, depresiones y miserias arrancan del hecho de vivir en la ilusión de creernos individuos aislados y cerrados, separados del prójimo, de la naturaleza y del cosmos, cuando la verdad es que somos manifestaciones de lo divino dentro de un contexto ecológico universal.
En El arte de ser Dios, Alan Watts aplica este diagnóstico y nos propone una nueva visión de las religiones -«un Dios más allá de la teología»- y una nueva aproximación entre mística y ciencia.
Escrito con inspiración, humor y entusiasmo, El arte de ser Dios es, indiscutiblemente, uno de los libros más importantes de Alan Watts.