A la hora de formar la fibra moral de su hijo pequeño, el conocido editor del New York Post percibe una lamentable carencia. Durante milenios, las grandes tradiciones éticas y religiosas del mundo han enseñado
que la verdadera felicidad consiste en perseguir la virtud y aceptar los límites. Pero ahora, desvinculados de estas obstinadas tradiciones, somos libres de elegir el modo de vida que consideremos más óptimo, ordinariamente el más fácil: nuestra civilización parece capaz de concedernos todos nuestros deseos. El resultado es una sociedad desgarrada por profundos conflictos y unas vidas individuales que, a pesar de su aparente libertad, están marcadas por la alienación y la infelicidad.
Ahmari ofrece doce preguntas fundamentales e intemporales que desafían nuestras certezas modernas. Nos invita así a examinar los móviles de nuestro comportamiento, y a vivir de forma más humana en un mundo que parece haber perdido el rumbo.