Como nos dice él mismo en el prólogo, Manuel Machado escribe en La guerra literaria sobre los estados de su espíritu frente a las cosas de la vida y del arte. Muestra las contradicciones a las que se enfrenta por hallarse en la encrucijada de las dos tendencias que dominan el panorama creativo de la primera década del siglo XX: el modernismo y el costumbrismo.
De este modo, su ensayo reflexiona sobre la lucha de los nuevos poetas, defensores de la estética modernista, contra la crítica y el gusto del público, habituados a las formas decimonónicas y arraigados a lo popular; sin duda, unos temas que influirán en la deriva literaria del propio Machado.