La Antroposofía como idea se dirige al pensamiento y a través del pensamiento puede hablar como calor luminoso al corazón. "Trabajando con la Antroposofía" puede contribuir a hacer nuestro pensamiento y nuestra vida del alma más independientes de las estructuras predeterminadas del cerebro y del cuerpo físico. Esta meta no tiene unos contenidos particulares, sino un proceso, un método, un acontecimiento, el cultivo de la experiencia de vivir, la experiencia del pensar intuitivo que tenemos con cada nueva comprensión. La aportación de Kühlewind a la práctica de la Antroposofía tiene dos aspiraciones: "Estimular el trabajo con la Ciencia Espiritual a través de ejercicios y estimular nuevas formulaciones independientes de sus contenidos basadas en la experiencia".