La creciente popularidad de la banda de heavy metal Wicked Child se ve perjudicada por las muertes de cuatro asistentes a sus conciertos. El mosso d'esquadra Erik Alanpoe es el encargado de detener al asesino en serie que ha desangrado a estos jóvenes y el recuerdo de su primera investigación de homicidio, seis años atrás, vuelve con intensidad al repetirse el modus operandi.
Erik debe enfrentarse a un caso en el que se encuentran involucradas fuerzas que escapan a su comprensión, y que afecta a su vida laboral y amorosa, pero defiende con vehemencia su teoría sobre la identidad del asesino, a pesar de que nadie la apruebe, porque no puede demostrar lo que ha averiguado.
A un paso de perder la cordura, Erik Alanpoe pondrá en peligro su vida y su carrera profesional al enfrentarse a un asesino invencible.