La obra de Noam Chomsky figura entre lo más valioso del legado intelectual del siglo XX. Más allá del acuerdo o el desacuerdo nadie puede dudar ya de la fertilidad de sus ideas. Desde una disciplina tradicionalmente alejada delos focos de mayor influencia científica, ha iniciado e inspirado la elaboración de una nueva imagen de la dimensión mental del ser humano. Nadie duda, en efecto, de protagonismo de Chomsky en lo que se ha dado en llamar la «revolución cognitiva» –para muchos, sin más, la «revolución chomskyana»–. Este libro intenta aclarar las principales aportaciones del lingüista norteamericano en los dos terrenos, el estrictamente lingüístico y el cognitivo. Ahonda en la cuestión de la deuda de su pensamiento con el racionalismo clásico, sigue el curso de su evolución a lo largo de los últimos casi cincuenta años y presenta la última hora de sus ideas.