¿Quién fue en realidad Poncio Pilatos, el hombre que mandó ejecutar a Cristo y luego se lavó las manos? ¿Qué sabemos a ciencia cierta de este oscuro funcionario romano que en el siglo I de nuestra era gobernaba una remota y agitada provincia del Imperio romano? ¿Existió realmente o forma parte de una leyenda, interpretada una y otra vez a través de los tiempos y las culturas?
La historiadora británica Ann Wroe ha dedicado tres años de exhaustiva investigación a aclarar lo que hay de mito y lo que hay de auténtico en la figura histórica de Pilatos, y el resultado es una extraordinaria biografía, capaz de transmitir al lector la enorme fascinación que desde comienzos de nuestra era ha suscitado este maestro de la ambigüedad.
Si las fuentes históricas directas referidas al personaje son escasísimas -unas pocas menciones en los Evangelios y en historiadores judíos de la época-, las indirectas -en forma de leyendas, textos apócrifos y otros testimonios de la fantasía humana- son, en cambio, abrumadoras. Con la habilidad de una auténtica narradora, Ann Wroe se interna por los dominios de la literatura y la historia romanas, la erudición bíblica o el mundo del teatro medieval. Con estilo ágil y desenvuelto, recrea la educación, la carrera pública, la vida cotidiana y las continuas revueltas de Judea en tiempos de Cristo. Y no faltan, para terminar, las evocaciones de la figura de Pilatos heredadas de autores como J.S. Mill, Swinburne, o Bulgakov.