Cuando digas la verdad ya no tendrás que esconderte.
Querida lectora, querido lector:
¿Quieres conocerme? Pues ya has dado el primer paso: leer esta contracubierta en la que no se puede contar mucho de lo que te vas a encontrar, ya sabes, los spoilers. Pero confía en mí: en cuanto la leas no podrás evitar recomendarla a tus amiguis, en persona o por las redes sociales, sobre todo en Instagram, adonde subirás una Story basada en ella, créeme. Y ya te doy las gracias de antemano porque es la manera de que, tras el éxito apabullante del libro, lluevan las ofertas para una miniserie o una peli, porfa porfa porfa, con un gran plantel de actores superbuenos y megapopulares, encabezados por mí misma, cinéfila, actriz de dudoso talento pero buenísima abogada de estrellas, treinta y dos años, bastante mona y elegante, vaya, una vainilla como Charlize Theron, y..., bueno, por George Clooney también (ya entenderás por qué cuando empieces a leer).
No es un thriller, aunque hay suspense; ni una novela de aventuras, aunque hay, y muchas, y desternillantes; ni una de superhéroes, aunque hay valentía y mutaciones; ni una novela romántica, aunque hay amor, desamor, deslealtades... Tiene todo esto y más, rollo comedia, ¿eh?, con amigas de las que no quedan y caída del guindo y muchas risas y giros de esos que te cambian la vida.
Y aquí lo dejo. Me llamo Diana y lo que quiero es contarte las veinticuatro horas frenéticas que precedieron a mi boda. Y, sobre todo, por qué me volví invisible.