El final de la Segunda Guerra Mundial contado desde un pequeño pueblo de los Alpes austríacos. Una brillante novela sobre el peso de la historia en la gente común.
Año 1944. Veit, un joven soldado vienés convaleciente del frente, se recupera de sus heridas en el pequeño pueblo de su tío, en plenos Alpes austríacos. Allí, a orillas del majestuoso lago Mondsee y cobijados bajo el gran monte del Muro del Dragón, los lugareños viven una extraña vida normal aparentemente alejados de la guerra. Está «el brasileño», que cuida incesantemente de su invernadero y sueña con regresar a Río de Janeiro; también su antipática casera y Margarete, la bonita maestra con su gran séquito de chiquillas, o su vecina Margot, con su pequeño bebé… Veit trata de sobrellevar, con todos ellos, sus terribles traumas de guerra. Una guerra que ya está perdida, pero que nunca parece terminar. Y llega el día en que las heridas de Veit están curadas y hay nuevo llamamiento a filas…