Estos textos ofrecen una visión cómica y desmitificadora de distintos estratos sociales y actividades profesionales, siempre en clave de humor y manteniendo el buen gusto y la corrección, pese a su intención correctiva. Una obra divertida, amena y de fácil lectura, que por su gran variedad puede agradar a un sector muy amplio del público.
«El humor no es un género literario, sino una perspectiva que funciona de manera transversal a las otras materias. Una vez hallado el punto del humor, pueden escribirse textos cómicos sobre cualquier tema que se conozca medianamente».
«Conocerse uno mismo es bueno, pero conocer a gente influyente en el gobierno es mucho mejor».
Enrique Gallud Jardiel