«En China, la palabra prostitución es turbia y fea». Nadie habla del tema, pues aparte de ser ilegal es un tema tabú, pero afecta las vidas de millones de jóvenes. Son repudiadas por la sociedad, maltratadas y agredidas por clientes y policías que, en ocasiones, son la misma persona. Zhang logra atrapar al lector con la conmovedora vida de Loto, una joven prostituta en Shenzhen, la ciudad del pecado. Conoceremos sus orígenes, cómo abandonó su pueblo para ir a trabajar a una fábrica en la ciudad y así pagar los estudios universitarios de su hermano pequeño y cómo acabó convirtiéndose en prostituta. Nos hará llorar y reír, y de su mano conoceremos los entresijos del día a día de un salón de masajes con unos personajes que no podremos olvidar fácilmente.