Más sorpresas, emociones y recuerdos en el tercer volumen del fenómeno con casi un millón de seguidores en Facebook y más de 300.000 libros vendidos.
¿Recuerdas los largos y fabulosos veranos en el pueblo con tus abuelos?
¿Todavía te sabes de memoria las canciones de los juegos de tu pandilla?
¿Volverías a revivir las anécdotas de clase?
Hay muchas historias de EGB por contar y Jorge y Javi, los creadores de Yo fui a EGB, están dispuestos a acompañarte por todas ellas. Descubre las nuevas sorpresas, emociones y recuerdos que contiene este tercer volumen de Yo fui a EGB.
«Yo fui a EGB ha sabido recopilar los iconos de una generación indeterminada y convertirlos en la cultura popular de este primer cuarto de siglo creando nuestra propia filosofía pop.»
Loquillo
«Bienvenidos los recuerdos, cuando el presente te decepciona, y el futuro no promete. No es bueno, no es sano, pero reconforta... Alivia las heridas. Estos libros me relajan y me divierten. Bienvenida sea esta tercera parte, que nunca fueron buenas. Pero ¿quién quiere algo bueno? Diviértanse y, sobre todo, no juzguen, que es de tontos.»
Álex de la Iglesia
«Yo fui a EGB y, como se puede observar, apenas me quedaron secuelas.»
Pablo Carbonell
«¡Me lo he comprado ya tres veces!, cada vez que viene algún imbécil de mis amigos se emociona y se lo tengo que regalar.»
Santiago Segura
«En cada página de este libro vuelvo a recordar a mis amigos y la merienda de mi madre. Es medicinal.»
Màxim Huerta
«Los que fuimos a EGB somos la última generación que llegamos vírgenes a la mayoría de edad. Eso lo dice todo de nosotros.»
Frank Blanco
«Yo fui a EGB representa a una generación perdida que se ha reencontrado gracias a este libro.»
Sandra Barneda
«Recuerdo esa época de curas con mucho cariño, hice los mejores amigos que aún conservo, entre capones, regaliz duro negro y petardos... Luego llegó el BUP y por fin, el sexo.»
David Summers
«Yo NO fui a EGB pero he disfrutado con cada libro como si hubiera ido.»
Mayra Gómez Kemp
En los blogs...
"Son unos libros que tienen que estar en cualquier estantería, porque son magníficos, no solo para recordar épocas increíbles, sino para enseñar a tus hijos la de cosas que hacías tú en esos tiempos y lo bien que te lo pasabas sin estar pegado a una pantalla. Recomendadísimo."
Blog Los mundos de Blue