Los Lemoine, una de las grandes familias esclavistas de Charleston, lo habían perdido todo tras la guerra de Secesión americana. Muerto en el frente el único hijo varón y con un padre con las facultades mermadas, tratar de salvar la plantación Fôret Rouge recayó sobre las espaldas de las dos hijas, Hortense y Margaux.
Adam Tilman, el descarado hijo del que fuera capataz de los Lemoine, siempre había estado enamorado de la mayor, Margaux. Una noche se coló en su dormitorio y la besó apasionadamente, y ella logró que lo echaran de la plantación. Sin embargo, antes de irse, se prometió que alguna vez esa mujer sería suya.
Terminada la guerra, Adam Tilman regresó a Charleston convertido en un adinerado empresario y decidido a aumentar su fortuna en el derrotado Sur. La petición de ayuda de una arruinada Margaux Lemoine le puso en bandeja una venganza largamente esperada…