¿Hubiese podido producirse sin él la marcha victoriosa del cristianismo en el mundo antiguo? ¿Se hablaría hoy del "Occidente cristiano" si este hombre no hubiese vivido? Aunque estas preguntas sólo se puedan contestar de manera especulativa, lo cierto es que Pablo de Tarso es uno de los pocos hombres que no sólo ocupan un papel especial en la historia, sino que a través de su obra e influencia permanente cambiaron la historia misma en su dirección y esencia fundamentales. Su vida marca y efectúa un giro en el tiempo histórico. No sin razón los historiadores, teólogos y escritores han intentado hasta nuestros tiempos comprender a esta figura. ¿Consiguieron acercarse realmente a la figura del apóstol y testigo?
Joachim Gnilka relaciona los detalles biográficos y las huellas históricas del Apóstol con una explicación de su mensaje y teología, caracterizando así la obra paulina como una teología en proceso, cuyos planteamientos centrales - la doctrina sobre Dios, la imagen sel ser humano, la revelación de Cristo, la soteriología y la eclesiología- son objeto de un minucioso análisis. La descripción de las imágenes de Pablo recogidas en Hechos de los Apóstoles y en las cartas deteuropaulinas esboza el cambio que sufrió ya en fechas muy tempreana la imagen del apóstol, y permite llegar hasta el Pablo histórico.