«Esta novela construye su lección sobre el dolor de la memoria y el drama de una identidad indeseable, quizá la de cualquiera de nosotros». [Jordi Gracia en 1001 libros que hay que leer antes de morir]
En una región ignota, perdida entre las brumas de la Edad Media, el baronet Otto Pette vive entregado en cuerpo y alma a la siempre difícil tarea del olvido del propio pasado, labor tanto más ardua en el caso de alguien que, como el baronet, ha cruzado hace tiempo, desengaño a desengaño, la tenue frontera del escepticismo.
En efecto, si en otro tiempo su mano empuñó con fiereza las riendas del poder, sus recuerdos acuden a él con idéntica saña, para robarle la placidez de su último retiro, al que la frustración lo ha empujado tras sufrir en propia carne los avatares de un cambio político a cuyo origen él no es en absoluto ajeno.
Pero no sólo los recuerdos le dan alcance en su refugio: un desconocido llama a la puerta de su mansión y entabla con el una suerte de duelo en el que la memoria es la primera arma, aunque no la única…