En cuestiones de amor, el compromiso no va con Rick, el mediano de los hermanos Chandler. Pero todo cambia cuando acude a socorrer a Kendall Sutton, una novia que se ha dado a la fuga y que jura que no se casará jamás. La aversión al matrimonio que ambos comparten hace de Kendall la mejor solución para ahuyentar a las admiradoras que intentan darle caza y acabar con las artimañas de su madre para buscarle esposa. Poco a poco, su apasionada farsa acaba convirtiéndose en realidad, y Rick se da cuenta de que quiere pasar el resto de su vida con Kendall. ¿Consentirá una mujer que reniega de las bodas casarse con uno de los mejores partidos de Yorkshire Falls?