Los niños podrán dar su toque personal a este relato de Hans Christian Andersen con un método original y sorprendente. Basta con pasar un pincel mojado en agua sobre las páginas para colorear las bonitas ilustraciones de La reina de las nieves.
Los dibujos van acompañados de textos especialmente adaptados para que los pequeños lectores descubran y comprendan este bonito cuento clásico.
El palacio de cristal, un bosque frondoso o el trineo de la reina surcando un cielo estrellado pasarán inmediatamente del blanco y negro a una extraordinaria paleta de colores. Una vez terminadas, las preciosas imágenes pueden guardarse como recuerdo o usarse para decorar