Laura está fascinada con los animales que vuelan: los pájaros, las mariquitas, las mariposas... Un día, decide que quiere aprender a volar y le pide ayuda a su mamá. Ella le explica que hay una forma de hacerlo: con la imaginación. Cuando Laura lo consigue, se siente libre como los pájaros, fuerte como las águilas y hermosa como las mariposas.