Este libro se asoma, desde un momento crítico como el actual, a otro tiempo convulso, el de las revoluciones liberales y de independencia en los mundos ibéricos, y lo hace desde una óptica poco común. El enfoque histórico-conceptual aquí adoptado presta una atención muy especial a los cambios en los vocabularios usados por los actores de la época y a las drásticas transformaciones en la conciencia histórica y temporal experimentadas en aquellas décadas decisivas que alumbraron un nuevo paisaje político sobre las ruinas de los imperios atlánticos.
Además de analizar aspectos cruciales de las modernidades ibéricas, como los cambios en los conceptos, mitos, metáforas e imaginarios, así como en las percepciones del tiempo histórico por parte de los agentes de los siglos XVIII y XIX, el autor arroja una mirada fresca sobre algunos puntos teórico-metodológicos de gran interés. ¿Para qué sirve la historia? ¿es posible recuperar los significados móviles y controvertidos del pasado? ¿cómo acercarse a la compleja dialéctica tradición-modernidad y a las quiebras en la conciencia histórica? En un mundo hiperacelerado como el nuestro, cuando el tiempo parece una vez más fuera de quicio, es oportuno buscar respuestas para estos y otros interrogantes que el historiador responsable habrá de afrontar en los difíciles tiempos que se avecinan.