Es muy grave la crisis cultural que padece Europa. Pero, ¿se trata realmente de una guerra civil cultural, o más bien de una crisis moral? El autor nos ofrece un hondo diagnóstico, y para ello analiza los orígenes de Europa que, como dice Weiler, no es solo una realidad empírica, sino un ideal, un proyecto de comunidad política, de sociedad mejor. Europa aspira a ser una comunidad ética, que tiene sus raíces en Grecia, Roma y Jerusalén. Su sensibilidad moral está condicionada por la herencia cristiana y también por las luchas contra ella. Reconocer la propia herencia no viola la libertad religiosa de los europeos, sino que la protege. Confundir neutralidad con laicismo produce desconcierto, y abre la puerta a la barbarie. Ignacio Sánchez Cámara (Madrid, 1954) es catedrático de Filosofía del Derecho y colaborador de ABC y Cope. Autor de varios libros, entre los que destacan: La teoría de la minoría selecta en el pensamiento de Ortega y Gasset; Derecho y lenguaje. La filosofía de Wittgenstein y la teoría jurídica de Hart; De la rebelión a la degradación de las masas; y La familia. La institución de la vida. Premio Luca de Tena 1998 y Premio Bravo de Prensa de la Conferencia Episcopal Española 2008. Actualmente es Consejero de Educación de España en Roma.