Las Cortes que se abrieron en Cádiz en 1810 representaron el primer gran proyecto modernizador de la España contemporánea. En la primera parte de esta obra se examinan sus grandes reformas, entre ellas la libertad de imprenta, que supuso el nacimiento del periodismo político, y la extinción del régimen señorial, que cambió la vida de millones de campesinos. En la segunda parte se estudia su obra magna, la Constitución de 1812, cuyo fulcro fue el principio de la soberanía de la nación, y se destaca su carácter de faro, de referente para las siguientes constituciones españolas y bastantes códigos fundamentales en otros países.