«El conjunto de estudios recogidos en este libro nos permite situarnos en una nueva manera de ver la ciudad. Ha sido un largo esfuerzo de décadas el que ha llevado a diferentes disciplinas a plantearse la ciudad bajo nuevas perspectivas. Frente a una concepción cosística, tendemos hoy a contemplarla como practice e interacción social, como arquitectura moral y simbólica y como lugar de la memoria y de la historia colectiva. Esta nueva manera de entender la ciudad se relaciona también con una nueva forma dinámica, socializante y abierta de entender el patrimonio. Detrás de todo ello está la conciencia obsesionante de la historia, que constituye una de las características más peculiares de la época contemporánea. La evocación histórica constituye un componente activo en la vida ciudadana con un influjo político, económico y vivencial que nos hace pensar en el uso y poética de la historia como recurso de diferentes grupos sociales.»