Carlos Cuarteroni, marino, geógrafo, comerciante de la Carrera de Manila, pescador de perlas, buscador de tesoros y obispo de Labuan, protagonizó en la segunda mitad del siglo XIX, una hazaña extraordinaria. En 1842, tras una perseverante búsqueda encuentra un barco inglés hundido en el mar de la China, lleno de lingotes de plata. Inmensamente rico, enemigo de la tiranía y la esclavitud, se impone la misión de liberar a los cientos de cautivos filipinos de los piratas moro-malayos, esclavizados en las numerosas islas que rodean Borneo. Al mando de su goleta Mártires de Tun-king, se presentaba en los puertos más peligrosos, y tras pagar sus correspondientes rescates, les devolvía a sus lugares de origen.
Los enfrentamientos en alta mar con los piratas, las intrigas del gobernador inglés de Labuan, la desconcertante actitud del sultán de Brunei, o la arrogancia del rajá de Sarawak, constituyen el trasfondo de su lucha diaria en pro de
la libertad y los derechos humanos.
En este libro se narra la experiencia de un hombre que convivió en soledad entre el mundo cristiano y el Islam, así como las tensas relaciones entre europeos, en plena era del
imperialismo colonial en el Pacífico Sur.
Su polifacética vida queda recogida en esta ?rigurosa biografía?; una historia increíble pero real la de este español, que supera la fantasía de autores como Emilio Salgari, quien bien podría haberse inspirado en los escritos histórico-geográficos del capitán Cuarteroni para su novela Sandokán.