En el verano de 2008, Toni Pou fue seleccionado por la Federación Mundial de Periodistas Científicos, junto con catorce periodistas más del resto del mundo, para cubrir una expedición científica al Ártico canadiense a bordo del Amundsen, un barco rompehielos dedicado a la investigación científica más puntera. Este libro, a medio camino entre el libro de viajes, la divulgación científica y la crónica personal, reconstruye el viaje de este joven periodista científico, que participa en las investigaciones que se desarrollan en el barco. En un relato fresco, sencillo, lleno de anécdotas entraña- bles, Toni Pou nos ilustra no sólo sobre las particularidades del Ártico, sino también sobre la ciencia en general. Inteligente, sensible y muy bien escrito, Donde el día duerme con los ojos abiertos, galardonado con el Premio Godó de Periodismo de Investigación y Reporterismo, es una pequeña joya que nos transporta a un mundo lejano, evocadora de las aventuras y la épica de las expediciones polares del siglo XIX.
«Entretenida como las novelas de aventuras, personal como los libros de viajes y con la intriga de la ciencia» (Toni Hernández, Diari de Terrassa).
«El autor es físico de formación pero también está interesado por la cuestión libresca, como lo demuestra el hecho de que abra y cierre el libro hablando de literatura: de Poe, al inicio, y de Nabokov, al final. En medio, no se priva de declararse entusiasta de Gombrowicz. Por una vez, ?las dos culturas? de C. P. Snow van de la mano, lo que no sucede tan a menudo como cabría desear ni en las dos direcciones» (Marc Soler, La Vanguardia).
«La formación de físico de Pou le permite divulgar los proyectos del Amundsen con amenidad y precisión. El paso por las aulas de teoría literaria y la curiosidad por la literatura ártica consiguen que Donde el día duerme con los ojos abiertos sea también un buen diario de a bordo en el que entrevistas, cenas y referencias oportunas a canciones se combinan con una mirada retrospectiva hacia los primeros exploradores árticos» (Jordi Nopca, Ara).
«Toni Pou ha conseguido un equilibrio entre intelecto y emoción. Y a través de los dos nos descubre los misterios y los atractivos del Ártico» (Salvador Llopart, La Vanguardia).