El Estado se ha encontrado, durante siglos, en una posición de privilegio para mantener la paz y desarrollar el orden con normas que trasciendan las formas centralizadas que nos ofrece para resolver nuestros conflictos. Sin embargo el Estado se ha ido centralizando cada vez más hasta convertirse en un «Estado Niñera» que bajo una máscara paternalista ha diseñado e implementado un andamiaje de reglas normativas que nos han bloqueado e impedido desarrollarnos individualmente de forma soberana. La resolución de conflictos online y la blockchain cambiaron por completo el concepto de ciudadano soberano, abriéndose nuevos horizontes que marcan el inicio de un nuevo paradigma. Con la adopción generalizada de plataformas (de resolución de conflictos en línea potenciadas con tecnología blockchain) como "Peacebuilder" los gobiernos se verán obligados a ofrecer a los ciudadanos este tipo de soluciones. Es posible que en el futuro veamos jurisdicciones más pequeñas tal vez a nivel provincial (en el lugar de los estados-nación); y, en última instancia, soberanías mucho más pequeñas aún, tal vez, ciudades o barrios. Esta gran transformación supone una nueva forma de imaginar a la sociedad, con un formato en el que las relaciones comerciales gravitarán hacia «círculos de honestidad», marcado por el uso de la tecnología blockchain que dará transparencia, inmutabilidad y trazabilidad a todo lo que queramos. El control sobre el resultado de las disputas y conflictos pasará del estado a los individuos, ya que cada vez es más fácil crear riqueza al agregar conocimiento a los servicios y productos descentralizados como el que se propone en esta obra.