Los directivos tienen que escribir diferentes clases de informes: informes para el consejo de administración, informes mensuales, informes de investigación... Incluso un memorando es frecuentemente una forma reducida de informe.
A pesar de la frecuencia con que un ejecutivo tiene que escribir informes, prácticamente ninguno de ellos recibe la formación adecuada par ahacerlo con corrección. La diferencia entre un informe malo y un informe bueno puede ser la diferencia entre alcanzar el objetivo o no, o entre causar buena impresión a los superiores o decepcionarlos.
En este libro se detallan todas la etapas de preparación de un buen informe, desde el momento en que se produce la solicitud hasta que el dosumento final está a punto para sr enviado a su destinatario.