El estudio de la preclusión presenta un especial interés desde la entrada en vigor de la Ley de Enjuiciamiento Civil (2000). En la vigente regulación del proceso civil, son diversas las previsiones legales que hacen referencia a la preclusión, presuponiendo una consideración unitaria de la misma que no existe en la práctica, máxime teniendo en cuenta la necesidad de deslindar la preclusión de otras figuras afines como son, entre otras, la caducidad y la prescripción extintiva. Según se destaca en el presente estudio, existen razones históricas y de Derecho comparado que demuestran que en la preclusión confluyen supuestos distintos, a veces relativos a la imposibilidad de ejercitar una facultad en un momento posterior del proceso -lo que el autor denomina preclusión impeditiva- y, en otros casos, más próximos a la vinculación entre procesos, rechazando o negando el ejercicio posterior de una facultad en otro proceso -preclusión excluyente-. Desde esta nueva perspectiva, es posible acudir al análisis de la jurisprudencia para deslindar los contornos imprecisos en que, con frecuencia, se lleva a cabo su aplicación por los Tribunales. El análisis se completa con la aplicación de la preclusión a los actos de alegación de las partes, delimitando el alcance de los artículos 400 y 401 de la Ley de Enjuiciamiento Civil, así como las posibilidades que se derivan de las denominadas alegaciones complementarias y aclaratorias.