El presente trabajo trata de exponer los diversos problemas que, desde una perspectiva penal, plantean los tipos que conforman el delito por excelencia dentro del fenómeno amplio de la corrupción: el delito de cohecho. El estudio versa por tanto sobre los aspectos penales, pero, no obstante, es importante poner de manifiesto dos ideas: la primera es que hay corrupciones toleradas, que, en sus niveles inferiores, son incluso fomentadas. La segunda idea se refiere a la impunidad de las conductas corruptas. La represión de estas conductas no es tan difícil como pudiera parecer si se da la doble condición de la represión social y la decidida intención de combatir la corrupción por parte de laos superiores. Es, por tanto, un problema de mentalidad o de conciencia social. En el libro se ponen de manifiesto las carencias y deficiencias que el Derecho penal tiene para combatir eficazmente este tipo de conductas delictivas.