Alimentación debe ser sinónimo de salud y armonía, pero no siempre es fácil convertir este razonamiento en realidad. De entrada, no existe una dieta única que sea adecuada a todo el mundo. Además, las estaciones del año conllevan necesidades distintas para el cuerpo, que también varía según la constitución física de cada uno, el metabolismo y los problemas de salud. Lo importante es introducir una regla de oro en nuestra vida: la del equilibrio ente la sencillez, el disfrute de los sabores y el respeto a los mandatos de la sana nutrición.