El éxito de la cocina catalana en las últimas décadas es indiscutible. Lo corrobora el hecho de que Cataluña tenga el mayor número de restaurantes galardonados con la estrella Michelin de España. La personalidad y el liderazgo de los chefs, la creatividad de las recetas, la innovación y el «fenómeno Ferran Adrià» son algunos de los factores que, como es sabido, han hecho posible que la gastronomía catalana haya alcanzado un nivel de excelencia tan alto. Pero, ¿existen otras causas? En esta obra se analizan otros motivos que ayudan a explicar este éxito, especialmente dos: las relaciones entre los cocineros y su formación. El anhelo por aprender y mejorar, el ambiente de colaboración y respeto mutuo son los ingredientes que han situado la cocina catalana entre las mejores del mundo.