«El esoterismo musical gira en torno al hecho de que no toda la música se escucha solamente con los oídos. Hay otra música del alma y de las esferas, que da su razón de ser a la música audible, aquella que es cantada por voces o interpretada con instrumentos.»
Sobre esta premisa, en el primero de los dos textos de esta edición, Joscelyn Godwin, uno de los grandes conocedores de la tradición pitagórica y de su influencia en la música occidental, desgrana a través de distintos periodos dicho poder: de los míticos Apolo y Orfeo a la música renacentista, barroca o romántica.
Filósofos, historiadores y teóricos de la música, desde Escoto Erígena, Macrobio y Boecio hasta Goethe, Steiner o Gurdjieff, pasando por Marsilio Ficino y Robert Fludd, son algunos de los nombres que se cruzan en estas páginas en las que la inspiración poética y filosófica se alía al estudio de la «música de las esferas» y de su influencia en el ser humano a lo largo de los siglos, desde el lejano Paleolítico, en el que lo simbólico era algo palpable, hasta nuestros días.
Completa esta publicación otro texto de Godwin: El resurgimiento
de la música especulativa, aquella que hace «observar el cosmos de manera musical, y la música de manera cosmológica». Aquella que, como un espejo (speculum), ayuda a contemplar la arquitectura del cosmos e interiorizar ciertas verdades que no pueden ser miradas directamente, sino como Perseo hace, mediante el reflejo de su escudo, para dar caza a la Medusa.