Cuando se comienza a enseñar a un intérprete la base de la técnica de su instrumento, el profesor es plenamente consciente de cuál es el punto de partida de su alumno: hay que explicar hasta el concepto más sencillo. No obstante, a la hora de abordar la enseñanza de la música de cámara, se suele dar por sentado que algunas de las nociones básicas ya son conocidas, lo cual no siempre es cierto. El contenido de este libro se desarrolló inicialmente en forma de «fichas temáticas» para utilizar en clase. Los conceptos que en él se explican son tan sencillos que al músico profesional y a muchos de los estudiantes avanzados les podrán parecer obvios. Sin embargo, la experiencia de repetirlos con frecuencia nos puede llevar a pensar que, sean o no básicos, los alumnos necesitan escucharlos alguna vez, especialmente durante sus primeras horas de aproximación a la práctica musical en grupo.
A partir de ese «Fichero de Música de Cámara» se ha elaborado este libro; sin embargo, su uso no tiene por qué ser distinto a utilizar las fichas, dado que toda la información está estructurada y ordenada de la misma manera: cuando sea necesario explicar un concepto, se puede buscar la página en la que viene descrito y pasarle el testigo de la lectura a uno de los alumnos. De todas formas, aunque se ha concebido como material de apoyo a las clases de Música de Cámara, su contenido es accesible tanto a profesionales como a estudiantes y aficionados.