Este libro trata de cómo percibimos las cosas que nos rodean y, en especial, la arquitectura. Con un lenguaje claro y preciso, el autor va describiendo las sensaciones que experimentamos ante los objetos cotidianos, desde una taza de té hasta una raqueta de tenis, para tratar de explicar así cómo se puede disfrutar mejor de los edificios que configuran nuestro entorno.
Escrito de forma que incluso los adolescentes interesados en la arquitectura puedan entenderlo, el texto tiene como objetivo 'tratar de explicar por todos los medios cuál es el instrumento que toca el arquitecto, para mostrar así la amplitud de su registro y despertar los sentidos ante su música'.